La teoría del color: guía básica para combinar colores

En el diseño gráfico muy pocas decisiones responden únicamente a la estética, las decisiones de color tampoco. El color es un herramienta de comunicación y cómo los combinas puede cambiar por completo un diseño y las sensaciones que despierta. Conocer la teoría del color y los principios que la rigen puede ayudarte a crear piezas más eficientes y a controlar qué transmiten tus creaciones. Piensa que, al mirar un cartel, un póster o una infografía, las primeras informaciones que procesamos se relaciona con el color. En el caso de las páginas webs, por ejemplo, una paleta de colores inadecuada, incluso puede llevarnos a abandonar el site, al igual que una perfectamente armonizada puede predisponernos a valorar positivamente el contenido ¿Entiendes ahora por qué es tan importante conocer la teoría del color? Pues sigue leyendo esta guía básica para combinar colores y aprende todos los trucos. 

¿Qué es la teoría del color?

La teoría del color es un conjunto de reglas básicas que definen todos los aspectos fundamentales del color en el diseño gráfico, el arte, la fotografía o la imprenta. Nos ayuda a comprender el efecto que provocan determinados colores y nos aporta una información valiosísima sobre cómo se crean y cómo se complementan. 

Conceptos fundamentales relacionados con el color

Antes de profundizar en el tema, creo que es importante saber el significado de tres cualidades fundamentales que nos ayudan a definir las propiedades de un color: tonalidad, saturación y luminosidad.

Tonalidad

Sinónimo de tono o matiz, se refiere al grado en el cual un color puede ser descrito como similar o diferente a otros colores (normalmente colores primarios: rojo, amarilo, azul). Simplificando, es lo que nosotros llamamos “color”.

Nos permite catalogar con un nombre a colores concretos basándonos en la frecuencia predominante. Por ejemplo, si miramos la imagen superior, casi todos definimos esos tonos como cercanos al rojo, porque esa es la frecuencia que captamos.

Saturación

Es el grado de pureza de un color, cuanto más puro es un color, más alta es su saturación. A veces, nos referimos a la saturación con el término “intensidad”, ya que los colores más saturados, los más puros, también son más intensos. 

Luminosidad

También llamada claridad, es la propiedad que nos hace percibir los colores como claros u oscuros, ya que los colores más oscuros son los que poseen una luminosidad más débil y en los más claros ocurre exactamente lo contrario. A veces relacionamos este concepto con términos como brillo, valor o luminancia.

Rueda de colores o círculo cromático

El círculo cromático, también denominado rueda de colores, es una herramienta muy útil para crear paletas y combinaciones adecuadas. Ordena de manera secuencial la progresión de los colores, cada uno ocupa una posición fija, y nos ayuda a entender la relación que guardan entre sí. En base a esas relaciones, podemos diferenciar tres tipos de colores: primarios, secundarios y terciarios. 

Tipos de colores

Colores primarios

Son el rojo, el amarillo y el azul. Estos no se crean al combinar dos o más colores distintos, por lo tanto, son la base del resto de colores. Al combinarlos, generamos los colores secundarios.

Colores secundarios

Son el verde, el naranja y el púrpura. Los colores secundarios se crean al combinar dos colores primarios.

• El púrpura es la combinación de rojo y azul
• El naranja se genera al mezclar el rojo con el amarillo.
• El verde nace de la unión del amarillo y el azul.

Colores terciarios

Los colores terciarios son los que se crean al mezclar un color primario con uno secundario:

• El rojo anaranjado o bermellón surge al combinar rojo y naranja.

• El amarillo anaranjado o ambar nace de la combinación de naranja y amarillo.

• El amarillo verdoso, lima o cartujo, se obtiene al mezclar verde y amarillo.

• El azul verdoso, azul turquesa o cerceta, se crea combinando el color verde con el azul.

• El azul violeta nace al mezclar el azul con el violeta.

• El rojo púrpura o granate lo obtenemos al combinar rojo con púrpura.

Es importante que sepas que los colores primarios no siempre pueden combinarse armónicamente con un color secundario para generar uno terciario. Por ejemplo, si combinamos el azul con el naranja, solo obtendremos un tono marrón. También es interesante y necesario crear estos tonos, solo debes tener claro que no se catalogan cómo colores terciarios, ni secundarios, ni primarios ¡Dato curioso! Si mezclas los tres colores primarios, también obtienes el marrón.

¿Qué ocurre con el negro y el blanco?

Esto que voy a contaros ahora va a dejaros completamente perplejos. Científicamente, el negro y el blanco no son colores. El negro es la ausencia de luz y el blanco es la combinación de todas tonalidades del espectro de luz visible. Sin embargo, vemos el negro y el blanco constantemente estampado en diseños ¿cómo se consigue? 

En realidad, todo lo que vemos no es puramente negro, ni puramente blanco. Son tonos muy muy aproximados que se obtienen combinando pigmentos de varios colores claros u oscuros .

Guía para combinar colores

Armonía de color

La armonía de color es simplemente aquello que nos hace percibir una combinación de color como algo ordenado y agradable. Cuando una paleta cumple con esa armonía, sentimos una especie de “calma visual” que nos hace interesarnos por un diseño, de igual modo, cuando vemos combinaciones de colores que no funcionan tendemos a rechazarlo. Errores muy comunes son olvidar que siempre debe haber un color dominante y que no debemos utilizar demasiados colores sin sentido, hacerlo incluso podría provocar que el mensaje que queremos transmitir sea ininteligible (como ocurre en la imagen superior).

Cómo combinar colores con el círculo cromático

La rueda de colores puede ayudarnos a crear paletas armónicas. Existen fórmulas que nos permiten obtener paletas básicas. Luego podemos customizarlas y trabajarlas tanto como queramos para obtener nuevas combinaciones. Existen 6 formas de combinar colores con el círculo cromático. 

• Combinación monocromática: en estas combinaciones utilizamos un único color del círculo cromático y el resto de tonos se obtienen jugando con la saturación y la luminosidad.
• Combinación Análoga: se forma combinando los colores que aparecen juntos en la rueda de color. 
• Combinación complementaria: se obtiene al combinar opuestos cromáticos, como el azul y el naranja. Con este tipo de combinaciones hay que tener cuidado, entre los colores que la componen hay un gran contraste y eso puede generar cierto “estrés visual”. La mejor forma de combinarlos es buscando el equilibrio, optando por tonos menos saturados o utilizándolos junto a un tonos neutros dominantes o un blanco.
• Combinación complementaria dividida: es igual que la complementaria, solo que se incluye un color cercano al complementario. Aunque sigue habiendo mucho contraste, jugando con la proporción en la que se utiliza cada color se logran diseños mucho más armónicos. 
• Triada: para esta combinación se traza un triángulo equilátero sobre la rueda cromática y se utilizan los colores que quedan en las esquinas. 
• Complementarios dobles o combinación tetraédrica: se combinan dos pares de colores complementarios, es la más difícil de equilibrar, normalmente se opta por un color dominante y se baja la saturación o la luminosidad del resto. 

Si te ha gustado esta guía para combinar colores, no puedes perderte nuestro post sobre paletas de colores pastel.